¿Cuál es el origen del Tricornio de la Guardia Civil?
El código de vestimenta de la Guardia Civil española es sin duda sinónimo de patriotismo y este sentido de protección de España y sus habitantes. A través de los siglos, la figura de estos cuerpos de seguridad se ha desarrollado como defensores del orden, siempre cuidando el bien común y respetando las leyes, todo con la mayor presencia de todos los tiempos.
La Guardia Civil siempre debe verse ordenada, debidamente identificada y en las mejores condiciones que impliquen su poder y deber. En medio de este discurso único hay un elemento icónico de la ropa, este es el sombrero tricornio, que ha existido durante cientos de años y tiene una historia consigo. Para hablar sobre el tricornio de la Guardia Civil, hay que echar la mirada al origen de la Guardia Civil.
Sucedió en 1844, cuando los mariscales José Ramón Rodil y Francisco Javier Chiron dieron el pistoletazo de salida de la Guardia Civil española, siendo ellos los primeros directores del cuerpo de seguridad. Así había sucedido cinco años antes con los institutos de Carabineros y ahora ambas instituciones funcionaban en paralelo. A partir de este momento, se comenzó a utilizar el tricornio, el diseño de la base ya lo tuvo en tenía. Sombrero con tres puntas, originalmente realizado en fieltro negro. Esta primera versión tenía una sección blanca o dorada, dependiendo del rango de guardia civil.
Tricornio de la Guardia Civil: símbolo de autoridad y poder
Portar el tricornio de la Guardia Civil prometía a la sociedad un ciudadano correcto y con ciertas habilidades y rangos. Este elemento del uniforme permaneció como su primera versión en fieltro negro por 16 años, cuando en 1860 se modificó su tamaño “un tanto” como expresa la circular del inspector general Don Isidoro de Hoyos y Rubín de Celis, marqués de Zornoza. En esa primera modificación, se redujo su tamaño para hacerlo mucho más práctico para las diferentes actividades que requerían agilidad y destreza.
El tricornio suponía poder y orden en las calles. Era visto como símbolo de que todo debía realizarse como se estipulaba en la ley. Su origen en sí debe desvincularse del Duque de Ahumada, pues durante mucho tiempo se le atribuía su creación en 1844, pero en realidad sería una propuesta que se complementaba por dos tipos de sombrero, uno para las fuerzas de caballeriza y otro para infantería, este último siendo totalmente diferente al tricornio original, pero dicha propuesta quedaría mimetizada, pues la Reina Isabel II ordenó unificar un solo tipo de sombrero, permaneciendo el tricornio hasta la actualidad.
Evolución Tricornio hasta nuestros días
Originalmente hecho de fieltro, se suponía que el tricornio se desarrollaría hacia el caucho, porque las condiciones climáticas sugirieron el desgaste inmediato de esta primera versión. La versión de goma se basó en cubiertas creadas por las mismas esposas de la Guardia Civil que decidieron un nuevo obturador con botones en los costados. Esta versión sirvió para completar el sombrero solemne, que consta de diferentes capas y colores, incluido el país. Poco a poco, el caso se dejó como base, y la forma se ha mantenido hasta hoy.
Pasó el tiempo y el tricornio continuó evolucionando con la tecnología. El caucho como material principal estaba cubierto de plástico, hasta que se convirtió en vinilo, lo que daría forma al famoso sombrero de la Guardia Civil. El siguiente paso fue poner el tricornio en charol, al menos en apariencia. El charol es un acabado de cuero que promete una mejor visión y durabilidad, pero nunca es el material principal para los tricornio. Del mismo modo, sus diversos puntos y pliegues tuvieron varias interpretaciones, en las que las metáforas, más que las aplicaciones prácticas, representan la mayor coincidencia.
En el período de posguerra, el uniforme se modernizó para priorizar los requisitos de combate, la practicidad de las unidades de transporte y los símbolos que pueden requerirse en algunos escenarios. Por lo tanto, el tricornio emergió gradualmente del uniforme de diferentes fuerzas. En primer lugar, desapareció de los observadores de tráfico, por lo que fue a las patrullas rurales e incluso a los responsables de los escenarios de terrorismo. Pero estas prendas de uniforme continuaron siendo brillantes durante muchas décadas del siglo XX, en la medida en que se convirtieron en un punto de referencia visual al hablar de la guardia civil.
Finalmente, la ley dio por sentado el tema de la forma oficial del tricornio de la Guardia Civil precisamente en 1989, cuando Louis Roldan, el director de la Guardia Civil, emitió oficialmente la liberación de este elemento uniforme. Este decreto, sin embargo, declaró que el tricornio permanecería en uniforme solo para embajadas y edificios.